jueves, 17 de septiembre de 2009

Se sentia traicionado.

Se sentia traicionado, habia soñado toda la vida, tanto lo habia soñado que siempre lo vio lejano en el tiempo. -Vendo hasta mi comida- habia dicho en alguna de las tantas veces que tomó ese maldito ron, con los que como él, tenian ese mismo sueño, el mismo destino, la misma risa y la misma alucinacion con ese wiro.

El pensaba que nunca, y lo juro, llorando alguna vez, alguna vez de esas veces que te levantas con ganas de amar y con el sentimiento puesto encima de tu ropa, pero nunca se dejaria llevar por la sucia, prejuiciosa y enferma sociedad.

El era un loco, un soñador un idealista.

Siguio toda la campaña, llevo a su hijo en a alguno de esos encuentros amorosos que habia vivido desde chico, hasta se animó a ponerse esas zapatillas, el blue jean viejo, el mismo que su esposa odiaba tanto, el infaltable escudo con el cual años atras habia pensado que era invencible y feliz, es asi como volvio a ese cemento que hace tiempo no era testigo de sus saltos y gritos de empuje.
Fueron los seis meses más raros, los seis meses más rapidos de su vida, siempre pensó que hay cosas que no llegas asimilar en el momento.

10 p.m del jueves, los gritos en su vecindario esta vez no eran callados por nadie, su hijo lloraba sin parar, ese dia no sintio verguenza de llorar frente a él. Como poder explicar esto, pensó mientras salia a la calle, caminó, vio la luz brillante y roja que expresaba el fuego del alma de la tribuna, esta vez la vio en medio de la calle, no se dió cuenta que sus mejillas ya no alcanzaban el rumbo de las gotas de lagrimas que caian en el suelo desde que salió de su casa.

Se sentó en alguna vereda de algun parque, ese dia nada era raro, como el habian miles de personas llorando, otras gritando, otras cantando o riendo, la unica diferencia era que el se sentia traicionado, su vida, sus sueños estaban en ese país vecino donde por television vio a ese mar de polos cremas entrar a la cancha y celebrar el maldito titulo que siempre soñamos tener, pero el estaba aqui, en el parque con su ropa de trabajo, con su auto y esa casa que le habia costado tanto, se sintio traicionado, traicionado por si mismo.

17.09.09

Vivir sin ti, mi peor pesadilla.